Melisa Faghir, nacida el 6 de Febrero de 1985 en Teherán (Irán), es una mujer que fue obligada durante su niñez a huir con su familia de lo que había sido su vida y su casa por injusticias y burocracia de su país de origen. Desde entonces se ha dedicado a ser una persona emprendedora, trabajando con ahínco y levantando dos empresas, las cuales no llegaron al éxito deseado por circunstancias personales. Pero de todo se aprende. Cuenta con estudios terminados de Turismo y Restauración. Debido a su interés y anhelo por profundizar y entender mejor el mundo de las enfermedades mentales, sobre las que ha investigado durante años, decidió escribir su propia historia como terapia personal y publicarla para ayudar en lo posible a los demás, tratando de hacer ver, con su ejemplo, el camino por el que una persona tiene que luchar tanto al verse obligada a emigrar, al igual que sucede al combatir con enfermedades de este tipo.

Esta novela autobiográfica recoge las experiencias más intensas de mi vida. Una vida que comenzó en Irán, donde me crie y viví feliz hasta que la madurez me abrió los ojos a la realidad. Una realidad marcada por los brotes psicóticos, las amenazas de muerte y el maltrato constante de mi padre. Las leyes nacionales no daban amparo en este tipo de situaciones, haciendo que el divorcio fuera una opción inviable. Temiendo por nuestra vida, presa de la desesperación, mi madre entregó su futuro a una mafia que prometía obtener visados que nos sacaran del país y nos llevarían a la prometedora tierra americana, donde tener un nuevo comienzo. Sin embargo, negociar con este tipo de organizaciones implica riesgos... como vernos abandonados a nuestra suerte en un aeropuerto español, sin papeles, sin conocimiento del idioma y sin ninguna escapatoria. Es una novela personal, intimista, que narra desde dentro el horror de la violencia, las decisiones a las que te aboca el miedo, el ser un refugiado en tierra de nadie y las consecuencias que todo ello conlleva. Es una realidad que no dejamos de ver en la televisión, es una verdad ante la que se debe generar conciencia y empatía, es la vida misma, con sus luces y sus muchas sombras. Son páginas de superación, de nunca llegar a ver la luz al final del túnel, pero también de seguir caminando sin detenerse, de cómo hoy puedo contarlo. Familia, deseos, amor, violencia, superación, depresión se entremezclan en cada capítulo, descarnando una realidad aún desconocida, sin filtros y sin mesuras.

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