Carlos Esquivel
Sobre el autor
Carlos Esquivel Guerra (Elia, Camagüey, Cuba, 1968). Después de sobrevivir como soldado en la guerra cubana en Angola (1988-1989), inició su travesía literaria, en la que cuentan más de veinte libros publicados. Investiga asuntos temerarios, enigmas fulgurosos, que a nadie más importan. Se graduó de las peores asignaturas que existen: cinco en Culturas purulentas (consumidas ya en su grácil escolaridad), cinco en La mejor forma de matar es dejarlo vivo (los profesores admitían una vocación inusual para esta materia), cinco en Desafectos literarios (aclara que esta graduación fue con honores), cuatro en Infidelidades (ha sido fiel a una novia y a dos o tres amigos), cuatro en Miedo (un día no lo tuvo), cinco en Leer mal y perversamente a algunos filósofos (Hume, Marx, Derrida, y Žižek son cartas de triunfo). La nota más ínfima, un 3.8, la obtuvo en Abandonar a tiempo el barco que se hunde (y esto se explica porque los hundimientos, todos, le procuran una beatitud facinerosa). Vive y muere en Cuba, rodeado de pesadillas, alcohol, literatura y un hijo. Cree en la reencarnación.
Un lobo, una colina
Esta es una novela para quienes creen que Kafka nació en Cuba, y, si no nació, al menos pasó algunas temporadas ahí (en el infierno, sutil redundancia). Kafka almuerza con Lezama Lima y Virgilio Piñera en un boscoso rincón de La Habana mientras empujan, defenestran, sobre mapas insurgentes y casi vivos: España, la poesía, el fútbol, la pintura, el jazz, los exilios supremos y la sobrevivencia imposible. Un lobo, una colina construye un ejercicio arriesgado y no menos seductor de arquitectura poética, aun desde máscaras que prefieren delinear el curso de una narrativa que renombra todo aquello que echa abajo. Una historia para facciosos que evitan la señal del stop a la simple velocidad de las pérdidas. Freud, Roberto Bolaño, Ana Karénina, Mary Pickford, Léon Bloy, Miles Davis y hasta el Barça y el Real Madrid dejan sus fragmentos en un paisaje grisáceo y absurdo, como si habitaran vidas que jamás imaginaron. Experiencia compleja, revisar las formas de un círculo cada vez más irremplazable. Autor que reescribe el curso subterráneo de una realidad tan desoladora e hiriente como los trazos que la convierten en auténtica literatura.